… La suave mezcla de musica, velos e incienso puede hacer que la paz regresa a mi…
Hace algunos años, cuando escuche por primera vez una melodia arabesca nacio en mi la inquietud por conocer mas sobre su origen y significado, queria saber de donde provenia ese sonido tan relajante, el unico que hasta esa fecha habia logrado eliminar mi tension; buscando en un mar de informacion y preguntando entre los expertos de la ciudad llegue a una escuela de danzas de medio oriente, para variar segui mis instintos y me inscribi al momento.
Dum dum tak e te, dum tak e te fue, el primer ritmo que aprendi a seguir, con el tiempo se fueron añadiendo nuevos sonidos: monedas, crotalos, percusiones y violines, acordeones y flautas y de vez en cuando una guitarra, voces extrañas que me transportaron a lugares magicos donde el tiempo no existia.
Cuando por fin presente mis nuevas habilidades a un publico desconocido pense que de nuevo el nerviosismo llegaria a mi, y que estropearia el momento, mi preocupacion se acumulaba tras bambalinas pero era disfrazada por telas, pulseras, collares y monedas, el maquillaje oculto la tension y el velo me protegio camino al escenario, con la esperanza de que la musica me llevara de nuevo a aquel estado de relajacion di la señal para que el grupo empezara a tocar, segui los ritmos desde la primera nota, movimientos estilizados, ondulantes, mis brazos danzaban con el velo y cuerpo se dejaba llevar, lo consegui, la tranquiladad me abrazo en ese momento y fue ahi donde me di cuenta de que el mundo podia desaparecer si asi lo deseaba, mi mente solo se dejaba llevar por aquel ambiente creado solo para mi, y con ello el instante mas relajante y exquisito se hizo presente, por primera vez en mucho tiempo disfrute un momento mio, por primera vez senti que todo quedaba atras y por primera vez pude ser yo misma a la vista de los demas, nadie existia en ese momento, solo la musica, mi velo y yo.
Fue en esa noche que descubri cual es mi puerta de escape, aprendi que los problemas se hacen menores y a veces desaparacen, que todo es felicidad cuando la musica se escucha y puedo seguir su compas, comprendi que este arte puede ser lo mas bello y me puede ofrecer la paz que tanto busque; ahora cuando necesito salir de la rutina, olvidarme de las labores o simplemente quiero un rato de tranquilidad se que puedo poner esas melodias, usar mi atuendo sin olvidar el velo y simplemente dejarme llevar... dejarme llevar a esa tierra magica donde el tiempo no existe.
3 comentarios:
WAPA!!!!!
… La suave mezcla de musica, velos e incienso puede hacer que la paz regresa a mi…
Hace algunos años, cuando escuche por primera vez una melodia arabesca nacio en mi la inquietud por conocer mas sobre su origen y significado, queria saber de donde provenia ese sonido tan relajante, el unico que hasta esa fecha habia logrado eliminar mi tension; buscando en un mar de informacion y preguntando entre los expertos de la ciudad llegue a una escuela de danzas de medio oriente, para variar segui mis instintos y me inscribi al momento.
Dum dum tak e te, dum tak e te fue, el primer ritmo que aprendi a seguir, con el tiempo se fueron añadiendo nuevos sonidos: monedas, crotalos, percusiones y violines, acordeones y flautas y de vez en cuando una guitarra, voces extrañas que me transportaron a lugares magicos donde el tiempo no existia.
Cuando por fin presente mis nuevas habilidades a un publico desconocido pense que de nuevo el nerviosismo llegaria a mi, y que estropearia el momento, mi preocupacion se acumulaba tras bambalinas pero era disfrazada por telas, pulseras, collares y monedas, el maquillaje oculto la tension y el velo me protegio camino al escenario, con la esperanza de que la musica me llevara de nuevo a aquel estado de relajacion di la señal para que el grupo empezara a tocar, segui los ritmos desde la primera nota, movimientos estilizados, ondulantes, mis brazos danzaban con el velo y cuerpo se dejaba llevar, lo consegui, la tranquiladad me abrazo en ese momento y fue ahi donde me di cuenta de que el mundo podia desaparecer si asi lo deseaba, mi mente solo se dejaba llevar por aquel ambiente creado solo para mi, y con ello el instante mas relajante y exquisito se hizo presente, por primera vez en mucho tiempo disfrute un momento mio, por primera vez senti que todo quedaba atras y por primera vez pude ser yo misma a la vista de los demas, nadie existia en ese momento, solo la musica, mi velo y yo.
Fue en esa noche que descubri cual es mi puerta de escape, aprendi que los problemas se hacen menores y a veces desaparacen, que todo es felicidad cuando la musica se escucha y puedo seguir su compas, comprendi que este arte puede ser lo mas bello y me puede ofrecer la paz que tanto busque; ahora cuando necesito salir de la rutina, olvidarme de las labores o simplemente quiero un rato de tranquilidad se que puedo poner esas melodias, usar mi atuendo sin olvidar el velo y simplemente dejarme llevar... dejarme llevar a esa tierra magica donde el tiempo no existe.
Mujer me encantaron las fotos que te tomaron te ves muy bonita saludos Paloma
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